Mientras llegaba a la casa y detuve bajo el edificio y mire el cielo.
La el día se despedía con una hermosa tonalidad rosa en solo una parte del cielo…
Me detuve a ver como terminaba…10 minutos duro el espectáculo de luces.
Es hermoso ver mirar hacia arriba. Es algo que ago desde que entre a la adolescencia y comencé a recibir la belleza del mundo.
Es tan relajante, saber que mantengo es “algo” que me hace todavía sorprenderme con las cosas comunes, simples y pequeñas del mundo.
Pude ver, como el cielo llegar a su máximo color rosa, y como poco a poco, acompañe su muerte.
El cielo se despedía y se alejaba cada ves mas, y junto con el se llevaba un niño de 15 años que comenzaba a conocer el mundo.
Tuve ganas de llorar, tuve ganas de correr detrás de el, pero no pude, tenia que ver como mueren los días.
Me vi envejeciendo teniendo la misma edad, sentí como la tierra se mueve poco a poco, y el cielo cada vez era menos rosa…
Grite y no me escucho…
Seguí atónito mirando hacia arriba, como un mártir que espera su fin.
En algún tiempo/espacio distinto, todavía quedan guardadas imágenes de un niño que solo sueña en conocer mas, que solo quiere respirar y seguir viendo hacia arriba, a pesar de que muchas cosas lo hacían ver atrás…
El cielo murió.
La el día se despedía con una hermosa tonalidad rosa en solo una parte del cielo…
Me detuve a ver como terminaba…10 minutos duro el espectáculo de luces.
Es hermoso ver mirar hacia arriba. Es algo que ago desde que entre a la adolescencia y comencé a recibir la belleza del mundo.
Es tan relajante, saber que mantengo es “algo” que me hace todavía sorprenderme con las cosas comunes, simples y pequeñas del mundo.
Pude ver, como el cielo llegar a su máximo color rosa, y como poco a poco, acompañe su muerte.
El cielo se despedía y se alejaba cada ves mas, y junto con el se llevaba un niño de 15 años que comenzaba a conocer el mundo.
Tuve ganas de llorar, tuve ganas de correr detrás de el, pero no pude, tenia que ver como mueren los días.
Me vi envejeciendo teniendo la misma edad, sentí como la tierra se mueve poco a poco, y el cielo cada vez era menos rosa…
Grite y no me escucho…
Seguí atónito mirando hacia arriba, como un mártir que espera su fin.
En algún tiempo/espacio distinto, todavía quedan guardadas imágenes de un niño que solo sueña en conocer mas, que solo quiere respirar y seguir viendo hacia arriba, a pesar de que muchas cosas lo hacían ver atrás…
El cielo murió.
9 comentarios:
Que lindo post, me gusto bastante tu descripcion de los atardeceres.
Nunca pierdas tu capacidad de asombro, las cosas simples de la vida, son gratis y son las mejores.
Buen dia!
Iba a decir algo, pero Atitel ya lo ha dicho, asi que ya sabes, a cuidar lo bueno y a mejorar lo malo
Un abrazo!
ah! como me gusta ler o que voce escreve. nem sei como te dizer isto... eu amo o que você escreve.
cuando vamos hablar en MSN?
Un ocaso que va más allá de lo visible .
Nostalgia y hermosura.
Gracias por ese intento de abrir las manos en mi esacio y tus hermosas palabras.
Saludos
Mucha sensibilidad y nostalgia, nos muestras en este escrito.
Que maravillosas son esas sensaciones, pero lo más importante es que aunque cada día el cielo muere, paradojicamente cada día nos permite ver ese a tardecer más rosadito que días anteriores, claro no con los mismos 15 años.
Uhm si hace un tiempo que no lo hago pero al hacerlo es como un conjunto de sentimientos que una experimenta... Me gustó, en especial el último párrafo.
eres mas bien, el bohemio encontrado. bien por ti y por mi, pasa pronto
un beso
Murió pero renace cada mañana para llenar de magia esa mente que describe este suceso tan divino.
Besitos.
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